Para ser libre como Pocahontas, no hace falta que corras por los bosques descalza ni que surques los ríos en canoa. Su libertad nace de un espíritu peculiar: no te ates a convencionalismos, mantén la mente abierta, aprecia lo diferente que hay en ti y en los demás, no te esclavices a las cadenas de lo que ves y oyes, haz caso a lo que sientes.
Tú, más que nosotros, entiendes lo que significa cargar con los vestigios de una colonización cruenta. Ahora los "colonizadores" desembarcan sobre otras mentes e imponen sus ideas a cualquier precio, ayúdales a descubrir colores en el viento...
1 comentario:
Ayyyy pero si es mi naturaleza primitiva querido colonizador!!!!!!
Aca si que hay posibilidades de caer en ello....estoy de cierta forma tan trastornada con cosas que he conocido tod mi vida pero que me resultan tan ajenas cada vez que regreso de viaje...en fin, me querras tan colombiana como venga?
Besos, te extragno y te quiero.
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